Con la presencia de autoridades nacionales y universitarias, la Facultad de Ingeniería inaugura las remodelaciones del Canal de Pruebas Navales y Marítimas.
Este canal tiene características que lo hacen único en la región y será una herramienta fundamental para la realización de ensayos físicos de obras portuarias y de costas.
El canal y su historia
El canal de pruebas es parte del Laboratorio Físico de Hidráulica del Instituto de Mecánica de los Fluidos e Ingeniería Ambiental (IMFIA). La construcción del canal data de la década de los años 60 con el impulso del Ing. Maggiolo, Director del entonces Instituto de Maquinas.
Es recién hacia 1986 que la Facultad de Ingeniería, conjuntamente con la Administración Nacional de Usinas y Transmisiones Eléctricas (UTE), la Administración de Obras Sanitarias del Estado (OSE) y el Ministerio de Transporte y Obras Publicas a través de la Dirección Nacional de Hidrografía (MTOP - DNH) deciden aunar esfuerzos y completar la obra inconclusa, la cual se inaugura el 5 de junio de 1992.
En su etapa inicial la instalación se dedicó a la calibración de instrumentos hidrométricos. Dadas sus dimensiones y capacidades, rápidamente se transformó en una herramienta fundamental en los estudios hidrodinámicos en el área naval y pesquera.
Recientemente, en el año 2013, con el apoyo de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) la Facultad adquirió un moderno generador de olas adecuado para este canal. Con la instalación de este nuevo dispositivo se potencia este laboratorio, dotándolo de características específicas que lo colocan a la vanguardia de esta clase de instalaciones.
La remodelación contó, además de la financiación de la ANII, con el apoyo de fondos centrales de la Universidad de la República, de la Facultad de Ingeniería y del IMFIA.
Las Instalaciones
El Canal mide 70 metros de longitud, 1.80 metros de profundidad y 1.5 metros de ancho. “Tiene una gran ventaja que son sus dimensiones. El tamaño al cual se hacen los modelos genera imprecisiones llamadas ’efectos de escala’, cuanto mayor es la escala menores son las distorsiones y por la tanto es mayor la precisión de los resultados”, explica el profesor Luis Teixeira, responsable de la Sección de Hidráulica Fluvial y Marítima del IMFIA.
La nueva pala es capaz de generar olas de hasta 60 cm de altura y puede reproducir el oleaje real que se produce en el mar. Además, una de las características más destacadas de la nueva pala – denominada “absorción dinámica” – es su capacidad de ajustar su movimiento para compensar el efecto del oleaje reflejado en el modelo que se estudia.
Usos y aplicaciones
El canal será utilizado principalmente por dos secciones del IMFIA, por el grupo de Hidrodinámica Naval, que trabaja con modelación y diseño de artes de pesca y cascos de embarcaciones, y por el grupo de Hidráulica Fluvial y Marítima, que estudia distintos tipos de fenómenos marítimos, portuarios y costeros.
Las nuevas instalaciones permitirán el diseño y evaluación de cascos de buques, de equipamiento de pesca así como el estudio de obras portuarias, el estudio de la interacción del oleaje con el lecho marino, la costa o con diferentes estructuras.
La generación de energía undimotriz también estará a prueba
URU-WAVE fue un proyecto financiado por el Fondo Sectorial de Energía de la ANII que tuvo como cometido el estudio y análisis de las posibilidades de extracción de energía proveniente de las olas, llamada energía undimotriz. Ese proyecto permitió establecer el potencial y la viabilidad para la explotación de este recurso en nuestro país. “Para eso se estudió lo que nosotros llamamos el clima de olas -cómo son las olas a lo largo del año en las distintas zonas de nuestro mar territorial- tanto en el Océano Atlántico como en el Río de la Plata”, explica Teixeira.
La readecuación del canal formó parte de este proyecto y permitirá continuar estudiando y evaluando el diseño de equipos extractores de energía del oleaje.
Asesoramiento y contacto
La línea de Ingeniería Marítima y Costera del IMFIA ha desarrollado gran parte de su tarea en base a convenios de asesoramiento con diversos organismos estatales. La Dirección Nacional de Hidrografía, la Administración Nacional de Puertos y las Intendencias son algunos de los actores que más han solicitado esos servicios.
“Para nosotros la interacción con terceros será la base del funcionamiento del canal. Estamos avizorando proyectos en los que podríamos participar, por ejemplo relacionados con el desarrollo de la infraestructura portuaria que está encarando el país: los proyectos de la ANP, Gas Sayago y el futuro puerto de aguas profundas, son emprendimientos en los que se necesitará asesoramiento y ensayos especializados.”, sentencia Teixeira.
Otra temática en la que el canal puede ser útil es en el estudio de la erosión y la recuperación de playas. En este sentido, el Instituto ha venido trabajando en diversas zonas de nuestra costa, entre las que podemos citar las soluciones propuestas para la playa de la Floresta en Canelones.
“El Instituto se ha caracterizado por promover el desarrollo científico y la investigación conjuntamente con la resolución de problemas concretos de la realidad nacional, manteniendo una relación permanente con el sector productivo”, culmina Teixeira.
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